1. LA ILUSIÓN ACUÁTICA:
Qué necesitas: Un vaso, agua y flechas impresas.
Cómo se hace: Simplemente sirve agua en el vaso frente a las flechas y
mira cómo se dan la vuelta mágicamente.
Lo científico: La luz se refracta o se dobla cuando pasa de un material a
otro. También funciona como una lupa, doblando la luz hacia el centro.
2. EL TRUCO DE LA PIMIENTA:
Qué necesitas: Agua, pimienta, un tazón y jabón.
Cómo se hace: Llena el tazón con agua y rocía la pimienta encima. Date
cuenta que si lo tocas con tu dedo no pasa nada. Pon algo de jabón sobre tu
dedo, tócalo otra vez y mira cómo la pimienta se propaga como por arte de
magia.
Lo científico: Debido a la tensión superficial, la pimienta flota encima
del agua. El jabón interfiere con el enlace de hidrógeno entre las moléculas de
agua, rompiendo la tensión superficial. Lógicamente, las moléculas de agua son
fuertemente atraídas unas hacia otras. Así que cuando la tensión superficial se
rompe, el agua se propaga hacia afuera. Son atraídas hacia las moléculas de
agua de afuera, haciendo que se extienda y llevándose la partículas de pimienta
con ella.
3. AGUA Y WHISKY
Qué necesitas: Agua, dos vasos de chupito, whisky y una tarjeta.
Cómo hacerlo: Llena un vaso con agua y el otro con whisky. Coloca la
tarjeta sobre el vaso lleno con agua. Dale la vuelta cuidadosamente usando la
tarjeta para evitar que se derrame todo. Coloca la tarjeta sobre el vaso con
alcohol y muévela ligeramente para crear un pequeño espacio. Espera cerca de 10
minutos y mira cómo el agua cambia de lugar con el alcohol.
Lo científico: Los líquidos tienen diferentes densidades. El whisky
simplemente flota arriba porque es más ligero que el agua.
4. EL GLOBO INCOMBUSTIBLE
Qué necesitas: Agua, una vela, un encendedor y globos.
Cómo hacerlo: Llena el globo con agua. Enciende la vela. Coloca lentamente
el globo sobre la vela. ¡Increíble pero no se revienta! Pero si lo dejas
demasiado tiempo sobre la vela sí se reventará.
Lo científico: Obviamente el agua absorbe bien el calor. El agua dentro del
globo absorbe el calor de la llama, enfriando el hule e impidiendo que se
reviente.
5. EL TRUCO DEL LÁSER
Qué necesitas: Agua, una botella de plástico y un láser.
Cómo hacerlo: Haz un pequeño orificio en la parte inferior de la botella.
Llénala de agua y asegúrate de que no se derrame nada. Apunta el láser
directamente al agujero. Deja que la corriente de agua salga y coloca tu mano
debajo de esta. Ahora el láser se refleja en tu mano.
Lo científico: En este caso la luz no se dobla totalmente. La corriente de
agua actúa como una fibra óptica transmitiendo la luz. Cuando el láser golpea
la corriente, este se refleja dentro de la misma, dando la ilusión de que la
luz se dobla.
6. AGUA TÓNICA QUE BRILLA EN LA OSCURIDAD
Qué necesitas: Agua tónica y luz ultravioleta.
Cómo hacerlo: Simplemente enciende y proyecta la luz ultra violeta hacia
el agua tónica.
Lo científico: El agua tónica contiene fósforos cómo el tinte de los
resaltadores. Los fósforos convierten la luz ultravioleta en luz visible,
haciendo brillar al agua tónica.
7. EL AGUA ANTI-GRAVEDAD
Qué necesitas: Agua, una botella de vidrio, una malla de plástico o de
metal, una banda de goma y palillos de dientes.
Cómo hacerlo: Corta una pieza cuadrada de la malla, colócalo en la boca de
la botella y asegúralo con la banda de goma. Llénala completamente con agua a
través de la malla. Tapa la boca de la botella y dale vuelta. No te preocupes,
no se derramará. ¡Ahora empuja los palillos a través de la malla y aún así no
se derrama nada!
Lo científico: Las propiedades de cohesión del agua causan que se formen
pequeñas aperturas en la malla, creando una “membrana” que sella la boca de la
botella. La presión del aire exterior es mayor que la presión del aire
embolsado dentro, manteniendo lo que mantiene el agua en la botella. Cuando empujas el palillo, el agua se envuelve alrededor del
palillo debido a sus propiedades cohesivas. Una vez que el palillo está dentro,
el agua lo libera y este flota hacia arriba ya que es menos denso que el agua.
8. EL CONGELAMIENTO INSTANTÁNEO
Qué necesitas: Agua purificada y un congelador.
Cómo hacerlo: Coloca el agua purificada en el congelador. Haz que el agua
esté a 0˚C, puedes controlarlo con un termómetro. También puedes colocar varias
botellas de agua en el congelador y hacer pruebas cada 30 minutos. A nosotros
nos tomó cerca de una hora para que el agua se congelara completamente. Sácalas
con cuidado o podrían transformarse en cristales de hielo. Transforma el agua
golpeando la botella. También puedes verter el agua en hielo o algo que esté
frio. Acabas de crear una granizada. (Esto también puede funcionar con
refrescos o cervezas).
Lo científico: El agua normalmente se congela alrededor de los 0˚C ó 32˚F,
formando cristales de hielo. Las impurezas en el agua pueden activar la
cristalización. La ausencia de estas impurezas en el agua purificada la
mantiene en estado líquido por debajo del punto de congelación. Al golpear o
tocar el hielo se activa la cristalización, ya que ya se encuentra en el punto
de congelamiento, convirtiendo instantáneamente el agua en hielo.
Fuente: Ciencia para Todos